Perfume (serie TV), de Philipp Kadelbach

Perfume

Serie de TV

(Parfum, Alemania, 2018)

de Eva Kranenburg, Philipp Kadelbach y Oliver Berben

Jesús Guerra

Comencemos por decir que el título en español de esta serie debe ser Perfume, así sin artículo, como en alemán, aunque en el mismo sitio de Netflix diga que es «El» perfume, puesto que El perfume es el título de la famosísima novela de Patrick Süskind, publicada en 1985, que en alemán lleva el título Das Parfüm. Por otra parte, en los créditos iniciales de los capítulos de esta estupenda serie dice que está inspirada en la novela El perfume, pero esto ha sido malinterpretado incluso por el sitio de cine IMDb, en el que dice que la serie es una adaptación de la novela, que la traslada al presente. No, obviamente no es una adaptación, sólo está inspirada en algunos de sus mismos temas. Y no sólo se inspiraron en estos temas los creadores de la serie, sino que hicieron que los propios personajes involucrados en el drama, de una u otra manera, se inspiraran en ella también, o por lo menos la conocieran.

Recordemos que la novela de Süskind es muy conocida en el mundo, y que no ha dejado de venderse desde 1985, así que en Alemania debe de ser más famosa aún, por lo tanto, todos los personajes saben de ella. De hecho, hay una escena maravillosa en uno de los capítulos iniciales en la que la policía interroga a los primeros sospechosos de los crímenes investigados, y les preguntan «¿de qué trata la novela El perfume?» Y los espectadores, que para ese momento ya conocemos un poco a estos personajes, al escuchar las respuestas comprendemos que cada uno de esos personajes interpreta la novela desde su propia personalidad y desde sus circunstancias específicas, es decir, desde su propia vida; todas las respuestas son diferentes y todas son correctas.

Roman Seliger (interpretado por Ken Duken en el presente y por Oskar Belton a los 15 años) descubre el cadáver de su vecina y amiga desde la secundaria (y amante ocasional) Katharina Läufer, mejor conocida como «K» (Siri Nase en el presente y Franziska Brandmeier a los 15). El cadáver presenta unos cortes en las axilas y en el pubis, y tiene la cabeza rapada. Llega el equipo de investigación policial, encabezado por el jefe de la policía, Joachim Grünberg (Wotan Wilke Möhring), la detective Nadja Simon (Friederike Becht) y el detective Matthias Köhler (Jürgen Maurer).

Para el funeral se reúnen los cinco amigos sobrevivientes del sexteto de la secundaria, algunos de los cuales tenían mucho tiempo sin verse: Roman, su esposa Elena (Natalia Belitski en el presente, Valerie Stoll a los 15), Moritz de Vries (August Diehl / Leon Lukas Blaschke), Daniel Sluiter —a quien apodan «Sin dientes»— (Christian Friedel, y a los 15 un actor joven cuyo nombre desconozco), y Thomas Butsche (Trystan Pütter / Julius Nitschkoff). Tan pronto están juntos se manifiestan las extrañas relaciones existentes entre los miembros de este grupo, relaciones que también vemos, en flashbacks, en su época de estudiantes.

En los primeros capítulos esta historia es tan misteriosa, con tantos enredos entre los personajes y con relaciones tan extrañas que nos parece estar viendo una versión dura y sin humor de la serie Twin Peaks original (David Lynch, 1990). También hay aquí algunos secretos de pueblo y esa aura ominosa y siniestra que emana de una buena parte de los personajes, y es que todos, tanto los sospechosos como la propia víctima y los policías tienen secretos oscuros y comportamientos repelentes (es decir que ésta es una verdadera obra noir). Una buena parte de los adultos jóvenes tienen problemas relacionados con su infancia, sus padres hicieron cosas terribles, y los adolescentes son también temibles y horrendos como personas, aunque como personajes son fascinantes.

La policía pronto sospecha del grupo de amigos de la cantante asesinada, el grupo que ya desde jóvenes eran bastante extraños. Como ya es costumbre en este género, a medida que los investigadores —y los espectadores junto con ellos— se van enterando de algunos detalles del pasado de cada uno, vamos dándole mayor o menor peso a las posibilidades de que uno u otro sea el perpetrador del crimen, y luego de los crímenes, pues pronto comienzan a aparecer otros cadáveres de mujeres mutiladas de la misma manera.

Quienes no hay leído la novela de Patrick Süskind, o por lo menos visto la estupenda adaptación cinematográfica de Tom Tykwer (2006, filmada dos décadas después de la publicación del libro) entenderán la serie sin problemas pero les faltarán las resonancias que produce el conocer esa obra (novela que, para mí, tiene el mejor final de cualquier obra narrativa de la historia de la literatura). Perfume es una serie fría y siniestra, estupendamente actuada, muy bien dirigida y bien escrita, aunque la verdad creo que al final quedan algunos cabos sueltos. Será cuestión de volver a ver algunos de los capítulos para comprobarlo. La música y la fotografía son buenísimas y ayudan a realzar cierto refinamiento en algunos momentos y algo sórdido y retorcido en otros. Todas las culturas tienen su lado oscuro, al igual que todos y cada uno de nosotros, y esta serie nos muestra ese lado inquietante de la sociedad alemana. Espléndida, ¡muy recomendable!

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Parfum (Perfume)

Creadores: Eva Kranenburg, Philipp Kadelbach y Oliver Berben

Dirección: Philipp Kadelbach

Guiones: Eva Kranenburg

Inspirada en la novela El perfume, de Patrick Süskind

Fotografía: Jakub Bejnarowicz

Edición: Bernd Schlegel

Dirección de producción: Cora Pratz

Música: Michael Kadelbach y Fabian Römer

Con: Natalia Belitski, Ken Duken, August Diehl, Christian Friedel, Trystan Pütter, Siri Nase, Friederike Becht, Wotan Wilke Möhring, Jürgen Maurer, Valerie Stoll, Oskar Belton, Leon Lukas Blaschke, Julius Nitschkoff, Franziska Brandmeier y Susanne Wuest, entre otros. 

Género: Drama, misterio, suspenso, policiaco

País: Alemania

Idioma: Alemán

Año: 2018

Duración: 45 minutos aproximadamente cada capítulo

Capítulos: 6

Se exhibe en Netflix

Nightflyers (serie TV), de Jeff Buhler

Nightflyers

Serie de TV

(Estados Unidos, 2018)

de Jeff Buhler

Jesús Guerra

La acción transcurre en el año 2093. El astrónomo Karl D'Branin (Eoin Macken) descubre, en la frontera de nuestro sistema solar, lo que no puede ser más que una enorme nave extraterrestre. Él dice que es necesario contactar a esos alienígenas porque es evidente que dominan la energía teke, la cual sería la única que podría salvar a nuestro planeta, el cual está ya en las últimas (o sea, peor que ahora). Contactarlos, piensa, es nuestra única oportunidad de aprender a manejar dicha energía (en el caso de que los humanos podamos llegar hasta ellos, contactarlos, comunicarnos con ellos y convencerlos de ayudarnos). Pero la comunidad científica a la que presenta su proyecto, ni siquiera le cree que ese descubrimiento pueda ser una nave extraterrestre.

Sin embargo, Karl es contactado por el capitán Roy Eris (David Ajala), el cual le dice que él sí cree en su descubrimiento (aunque no le dice cómo se enteró) y que él tiene una nave creada precisamente para viajar al espacio profundo (o como se llame), la cual es la más sofisticada del planeta, y la pone a su disposición. Esto, que en realidad es un flash-back lo vemos como un recuerdo de D'Branin. En realidad, ya están en el viaje, y la nave (llamada Nightflyer) tiene un recinto especial en el que, quien ocupe su único asiento, puede «ver» sus recuerdos. También por estos recuerdos revividos nos enteramos de que durante el tiempo en que se hacían los preparativos del viaje, la hija de D'Branin enfermó de un virus extraño y murió. La hija se llamaba Skye (Bronte Carmichael).

La nave es enorme y lleva una gran cantidad de personal. Entre los más importantes están Thale —un telépata de los más poderosos clasificado como L1, aunque nunca nos dicen qué significa eso (Sam Strike)—, la Dra. Agatha Matheson —una psicóloga encargada de atender y manejar al telépata (Gretchem Mol)—, Melantha Jhirl —una navegante diseñada genéticamente para este tipo de viajes espaciales y, al parecer, milusos (Jodie Turner-Smith)—, Rowan —el biólogo de la expedición (Angus Sampson)—, Auggie —el segundo de abordo (Brian F. O'Byrne)—, Lommie —una especialista en computación quien tiene un dispositivo en un brazo para conectarse directamente al software de la nave (Maya Eshet)— y Tessia —la encargada de la sección de vegetales de la nave, la cual se encuentra en un enorme domo que contiene un fragmento de bosque (Miranda Raison).

El viaje, entonces, tiene el proyecto de interceptar en un punto del espacio a la nave extraterrestre de estos seres inteligentísimos y sumamente avanzados a los que llaman los «volcryn» (aunque tampoco nunca nos explican de dónde sale ese nombre) y establecer contacto con ellos, y para eso llevan a bordo al telépata Thale. Pero hay un problema, la gente (incluidos muchos de la nave) le tienen miedo a los telépatas, a los que consideran violentos, casi psicópatas y a los que les llaman fenómenos. Está claro que lo que hacen los telépatas es defenderse de la gente común, y su método de defensa puede ser aterradora pues se meten en la mente de las personas y les hacen ver alucinaciones, o les producen una especie de ruido mental terrorífico. Pero algo que no pueden hacer es manejar mentalmente la computadora u otros aparatos de la nave, sin embargo, cuando en este peligroso viaje comienzan a producirse accidentes raros y fenómenos extraños, sobran los que empiezan a culpar al telépata. 

El capitán, por su parte, se comporta de manera misteriosa pues generalmente permanece encerrado en su habitación y se comunica con su tripulación y sus pasajeros mediante proyecciones holográficas, y poco a poco algunos miembros del grupo de científicos comienzan a suponer que el capitán les oculta algo importante. Mientras tanto, la nave se acerca al campo de influencia de la energía extraterrestre, lo cual también tiene consecuencias.

La historia es bastante interesante y maneja temas que de por sí llaman nuestra atención, por lo menos a quienes nos gustan el misterio, el terror y la ciencia-ficción, sin embargo, hay que decirlo, aunque en términos generales está bastante bien hecha la serie, también hay momentos en que algunas de las actuaciones no están a la altura y, por otra parte, algunos personajes realizan acciones que no son lógicas —aunque siempre se puede culpar a la energía cada vez más cercana y poderosa de los volcryn— hasta que la nave —esto sí está planeado, por supuesto— es un verdadero caos. En general esta historia tiene alguna originalidad, pero también tiene muchas cosas que hemos visto ya, desde 2001: A Space Odyssey (Stanley Kubrick, 1968), pasando por Solaris (Andrei Tarkovsky, 1971; Steven Soderbergh, 2002), Event Horizon (Paul W.S. Anderson, 1997) y otras más. Hasta tiene su momento The Shining (Stanley Kubrick, 1980), su momento resplandeciente, si ustedes quieren, con Rowan imitando a Jack Torrance o Angus Sampson imitando a Jack Nicholson…

La historia general está basada en la novela corta homónima (llamada en español «Viajeros de la noche») de George R. R. Martin, pero en algún momento la serie se desprende y crea sus propios personajes y sus propias líneas argumentales, pues la idea es extenderla durante varias temporadas, sin embargo, aún no está confirmado que vaya a existir una segunda temporada, aunque su creador, Jeff Buhler, ha dicho en entrevistas que él sí espera que se acepte la producción de la siguiente temporada y dice tener ya planeada la historia para ella. El final de la primera temporada es interesante, complejo y muy polarizante, pues hay espectadores a los que les gusta y a quienes les parece frustrante. Tiene la ventaja, creo yo, de que es un interesante final abierto, en caso de que la serie terminara aquí, o de un final misterioso para hacer desear ver la continuación, si es que ésta llega.

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Nightflyers

Creador: Jeff Buhler

Historia basada en la novela corta de George R.R. Martin

Dirección: Andrew McCarthy (2 episodios), Mark Tonderai (2 episodios), M.J. Bassett, Mike Cahill, Maggie Kiley,

Nick Murphy, Stefan Schwartz y Damon Thomas.

Guiones: Jeff Buhler (desarrollo general), Daniel Cerone, Michael Golamco, Amy Louise Johnson, Terry Matalas, Christopher Monfette, Brian Nelson, y Lindsay Sturman.

Editor argumental: David Schneiderman (10 episodios)

Fotografía: Gavin Struthers (6 episodios), Peter Robertson (3 episodios) y Markus Förderer.

Edición: Tad Dennis (4 episodios), Peter Forslund (3 episodios), Toby Yates (3 episodios) y Mike Weintraub (1 episodio)

Dirección de producción: David Ingram, David Sandefur

Música: Will Bates

Con: Eoin Macken, David Ajala, Jodie Turner-Smith, Angus Sampson, Sam Strike, Maya Eshet, Brían F. O'Byrne, Gretchen Mol, Bronte Carmichael, Miranda Raison, Aoibhinn McGinnity, Phillip Rhys, Zoë Tapper, y Gwynne McElveen, entre otros. 

Género: Ciencia-Ficción, terror

País: Estados Unidos

Idioma: Inglés

Año: 2018

Duración: 60 minutos aproximadamente, cada capítulo

Capítulos: 10

Se puede ver en Netflix