Pasión, un asesinato perfecto
(Passion, Alemania, Francia, 2012)
de Brian De Palma
Jesús Guerra
Christine (Rachel McAdams) tiene un alto puesto en la
sucursal de Berlín de una compañía de publicidad norteamericana; Isabelle
(Noomi Rapace) es su asistente y aprendiz, y Dani (Karoline Herfurth) es la
asistente y secretaria de Isabelle. Al parecer Christine e Isabelle hacen un
buen equipo creativo, y Christine intenta hacer sentir a Isabelle que son más
que eso, que en realidad son amigas. Christine, que no es tan sofisticada como
cree, es una manipuladora de tiempo completo. Es también así con su amante,
Dirk (Paul Anderson). Hay un constante juego sexual entre las dos, y entre los
tres, pero Isabelle es más seria, no disfruta esos juegos... aunque no es tan seria
como parece pues en realidad ella ya mantiene relaciones con Dirk, a espaldas
de Christine.
Estos juegos podrían haber seguido así de manera
indefinida de no ser porque en una ocasión en que Isabelle desarrolló una idea
publicitaria que terminó pareciéndole estupenda a los clientes de la compañía,
Christine se adueñó de la autoría del concepto. Isabelle le reclamó, seria pero
de buena manera a su jefa, y Christine le respondió que eso no era una traición
puesto que eran un equipo, que eso era lo normal. Isabelle pareció
tranquilizarse pero en realidad los golpes bajos continuaron. Siguieron las
traiciones y las mentiras, y luego las humillaciones. Hasta que una de estas
dos mujeres es asesinada y la otra es la sospechosa número uno.
Para quienes conocen la filmografía de Brian De Palma, el
guionista y realizador de esta cinta, Pasión es la quintaesencia de la
vertiente más personal de este cineasta. [En efecto, De Palma ha dirigido tres
tipos de thrillers: Los genéricos, como Carrie, 1976; The Fury, 1978;
Blow Out, 1981; Scarface, 1983; Los intocables, 1987; Carlito's
Way, 1993; Misión imposible, 1996; Snake Eyes, 1998, y La
dalia negra, 2006, entre otros. Los personales (por lo general siguiendo
muy de cerca u «homenajeando» a Hitchcock), como Obsesión, 1976; Vestida
para matar, 1980; Doble de cuerpo, 1984; Raising Cain, 1992; Mujer
fatal, 2002, y Pasión, un asesinato perfecto, 2012. Tiene además
otro tipo de cintas, que esencialmente son thrillers también, pero
pueden ser de ciencia-ficción (Mission to Mars, 2000), de guerra (Casualties
of War, 1989), musicales (Phantom of the Paradise, 1974) o supuestas
comedias (The Bonfire of the Vanities, 1990).]
Además, De Palma es sumamente irregular, algunas de sus
películas le quedan muy bien, otras son regulares y otras son bastante malas,
pero tiene otra característica interesante: aunque nunca ha hecho una gran
película a los cinéfilos nos gustan sus filmes porque son muy
«cinematográficos», y con esto lo que quiero decir es que sus obras por lo
general son películas hechas en base a otras películas, a ciertos autores, a
ciertas tendencias, a determinados géneros y a determinados recursos fílmicos. Por
esto a quienes nos gusta el cine sus cintas nos gustan, aunque no sean muy
buenas, o aunque sean bastante regulares... ya cuando son muy malas las cosas pueden
cambiar. Brian De Palma es un director técnicamente muy capaz, y aunque tal vez
nunca haya tenido una idea original, siempre ha sabido qué robarse y de quién,
por eso es un realizador muy respetado, y a estas alturas quizá sea más
respetado en Europa que en Estados Unidos, su país de origen (hay que tener en
cuenta que Pasión… está financiada
por Alemania y Francia pero no los Estados Unidos).
No deja de ser curioso que las películas más «personales»
de De Palma sean en realidad cintas hitchockianas. Por lo tanto, no sorprende
que Pasión…, por personal que pueda ser, sea en realidad un remake
de una película francesa del año 2010, Crime d'amour, escrita por Alain
Corneau y Natalie Carter, y dirigida por Corneau (de hecho fue su última
película, pues el cineasta francés murió ese mismo año, a los 67 años de edad).
Pasión... es, entonces, una cinta hecha en base a una película ajena, con
técnicas prestadas de Hitchcock, en la que se encuentran muchas de las
características y los temas de las anteriores cintas de De Palma (gemelos, voyerismo,
personas equivocadas, pantalla dividida, y finales con sueños que se mezclan
con la realidad, ya sea para asustar al espectador o para engañarlo por última
vez, etc.). Se ha acusado a De Palma de que en esta cinta llega a robarse a sí
mismo, plagiando escenas de su propia obra. Me temo que es cierto, pero eso en
realidad no importa tanto. En otras artes a eso se le llama estilo personal.
La cuestión importante es si los espectadores disfrutamos la cinta o no. Y yo
la he disfrutado.
Mención aparte merece la música del compositor italiano
Pino Donaggio, quien ha colaborado varias veces con Brian De Palma, entre otras
películas en Vestida para matar y ahora en Pasión. Su música es
deliciosamente envolvente en las escenas misteriosas y truculentamente
excesiva, pero estupenda, en las escenas violentas. Tiene un estilo muy
particular por lo que es inconfundible, y para sus fans, entre los que me
encuentro, maravilloso. Me encanta que la música de Pasión sea suya.
Para terminar, creo que vale la pena apuntar, como
curiosidad, que ésta es la segunda película en la que han trabajado juntos
Rachel McAdams, Noomi Rapace y Paul Anderson, la primera fue Sherlock
Holmes: a Game of Shadows (Guy Ritchie, 2011).
. . . . . . . . . . . . . . .
Pasión, un asesinato perfecto (Passion, Alemania y Francia,
2012). Dirección: Brian De Palma. Guión: Brian De Palma (basado
en la película Crime d'amour, de Alain Corneau). Fotografía: José
Luis Alcaine. Música: Pino Donaggio. Diseño de producción:
Cornelia Ott. Con: Rachel McAdams, Noomi Rapace, Karoline Herfurth y
Paul Anderson, en los papeles principales. 102 minutos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario