lunes, 17 de abril de 2017

Una semana de vacaciones, de Christine Angot



Una semana de vacaciones
de Christine Angot

Jesús Guerra

Edición original francesa
Una semana de vacaciones es una novela polémica y dura escrita por Christine Angot, publicada en Francia en 2012, y en español, por Anagrama, en 2014. Una pareja está de vacaciones en un pueblo de Francia en 1975 (el año no se menciona, pero cuando el hombre lee el periódico en una escena en que cenan en un restaurante, el titular anuncia que murió Franco). Sobre todo, el relato está centrado casi exclusivamente en la narración-descripción de diversas relaciones sexuales de esta pareja, así que de entrada parece una novela erótica (muchos dirán que pornográfica), hasta que nos damos cuenta que se trata en realidad de un texto antierótico. Primero, por el lenguaje. Las relaciones son descritas minuciosamente, con objetividad y frialdad. No es un sexo festivo ni pretende provocarle placer al lector. Luego, por las características de los personajes. El hombre ordena, manipula, engaña. La mujer obedece. Hay una relación de control y sumisión. A través de diversas pistas nos enteramos de la diferencia de edad entre el hombre (maduro, culto, maestro universitario, lector de periódicos —Le Monde— y libros en diversos idiomas, especialista en lengua francesa, casado, padre de familia, con varias amantes) y la mujer (una adolescente). Nunca se mencionan los nombres. No se menciona el vínculo entre ellos, pero los lectores sospechamos pronto que se trata de padre e hija. El hombre goza, la mujer obedece y aguanta. Ella soporta diversas incomodidades y dolores. A veces incluso llora. El hombre, entonces, se molesta y amenaza con interrumpir las vacaciones. Ella pide, como muestra de amor, que al día siguiente no suceda nada físico entre los dos. El hombre acepta... pero al día siguiente olvida su promesa.
 
Portada original con cintillo
con foto de la autora
En el texto hay indicios de que el hombre es el padre de la joven, pero nada indica que la novela sea autobiográfica. Sin embargo, tanto algunos elementos de la vida de Christine Angot (nacida Pierrette Marie-Clotilde Schwartz en 1959) como de su obra (el tema del incesto es recurrente, y tiene una novela anterior que fue también muy polémica y fue su primer éxito de ventas, llamada, precisamente, El incesto (de 1999, que no está en Anagrama sino en Seix Barral). Para colmo, la autora es reconocida como una de las representantes en Francia del género conocido como «autoficción», muy cercano pero diferente a la «novela autobiográfica» (tema para otro artículo). Es conocida por introducir en sus novelas escenas reales de ella misma y de otras personas (de hecho, escritores, editores y celebridades le tienen miedo, pues saben que cruzarse con ella y entablar una conversación podría hacerlos aparecer en la siguiente novela de Angot).

Edición francesa de bolsillo
Una semana de vacaciones no es una obra de autoficción, pero podría ser una novela autobiográfica (ojo, el hecho de que el género sea «novela» implica ficción, aunque parta de hechos reales). En un artículo publicado en El Periódico (de España) el 19 de febrero de 2014, firmado por Elena Hevia, encontramos lo siguiente: «En su visita a Barcelona, Angot, tajante, deja bien a las claras que no está dispuesta a hablar de la persona. "Yo nunca he hablado de lo que me ocurrió con mi padre. Todo lo que he relatado está situado en el lugar protegido de la literatura, que no tiene nada que ver con el espacio social"». Más adelante, la autora explica, de alguna manera, el motivo para la escritura de esta obra: «En casi todas mis novelas aparece una situación de este tipo. Y mi forma de describirla no es invasiva. No muestro el pensamiento de la persona dominada, lo que me interesa es que el lector perciba esta dominación a través de la escritura, desarrolle un sentimiento de fraternidad por la chica y sienta una profundad antipatía ante el hombre».

Edición en catalán
El hecho de que en este blog esta entrada se encuentre etiquetada como «novela erótica» se debe a su relación con este género, aunque sea sólo por oposición pues, como ya apunté líneas arriba, en realidad Una semana de vacaciones es lo opuesto a una novela erótica; de hecho, la obra se ganó el Premio Sade 2012, el cual rechazó la autora a través de una carta al jurado del premio, en la que decía: «La imagen de ese premio, corresponda o no a la obra del Marqués de Sade, está en contradicción total con el libro que he escrito.»

Una semana de vacaciones es un libro necesario en la medida en que nos hace reflexionar acerca del sometimiento, del abuso de autoridad y la manipulación en los casos de incesto con niños y adolescentes. Por supuesto, no es una obra para todo tipo de lectores (se recomienda para lectores maduros), habrá quienes no la soporten. Una de sus virtudes, sin embargo, es su brevedad: sólo 104 páginas.

Christine Angot ha escrito 19 novelas y una decena de obras de teatro. Escribe ensayos, y también artículos para periódicos y revistas, ha grabado los audiolibros de dos de sus novelas, y es una celebridad mediática en su país. Ha recibido el premio France Culture en 2005, por sus libros Les Désaxés y Une partie du cœur; el Prix de Flore en 2006 por Rendez-vous; el Premio Sade en 2012 por Una semana de vacaciones (que rechazó); y el Prix Décembre 2015. En el año 2013 fue nombrada Officier des Arts et Lettres.

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Una semana de vacaciones. Christine Angot. Traducción de Rosa Alapont. Anagrama, colección Panorama de Narrativas. 104 págs.